Empieza hoy, miércoles 2 de marzo, con el gesto de la imposición de la Ceniza, la Cuaresma, el periodo de cuarenta días que precede a la Pascua, en el que los cristianos están llamados a renovar la propia vida.
Este tiempo de preparación espiritual es «un viaje que implica toda nuestra vida, todo lo que somos. Es el tiempo para verificar las sendas que estamos recorriendo, para volver a encontrar el camino de regreso a casa, para redescubrir el vínculo fundamental con Dios, del que depende todo» (de la homilía de Papa Francisco durante la Misa del Miércoles de Ceniza del año pasado en la Basílica de San Pedro en Roma).